La crisis y la falta de campañas desaniman a denunciar malos tratos
Solo 16 de las 62 muertas por violencia de género en 2011 habían emprendido acciones legales
Sanidad ha reducido un 70% el presupuesto para alertar contra el maltrato
“No es cierto que las mujeres mueran a pesar de denunciar”, afirma Inmaculada Montalbán, presidenta del Observatorio de Violencia de Género del Consejo General del Poder Judicial. En 2011 fallecieron 62 mujeres a manos de sus parejas o exparejas. Son menos que en 2010, cuando 73 perdieron la vida por este motivo. Se mantiene, sin embargo, el alto porcentaje de asesinadas que no habían denunciado a sus presuntos agresores. Solo 16 de las fallecidas en 2011 lo habían hecho (26%), según el informe sobre víctimas mortales de la violencia de género y de la violencia doméstica del CGPJ. “Es una cifra que se repite cada año: entre 7 y 8 mujeres de cada 10 asesinadas, no habían denunciado. Y nos lleva a preguntarnos por qué. Es preocupante”, dice Montalbán. En 2012 el dato es aun más negativo: solo 3 de las 26 fallecidas hasta la fecha habían iniciado acciones judiciales (12%).
“Hay que mantener las campañas de sensibilización porque si no iríamos a una invisibilización. Y no nos lo podemos permitir”, insiste Montalbán. El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad ha reducido, sin embargo, un 70% el presupuesto para alertar contra el maltrato. Los cuatro millones que se emplearon para este fin el año pasado, se quedan 1,5 millones con el recorte. “El Gobierno anterior hacía campañas a bombo y platillo. Campañas de televisión muy caras. Nosotros creemos que hay medios más eficaces y baratos”, declaró el secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Juan Manuel Moreno, el pasado abril. Su intención es apostar más por las redes sociales para llegar más a los adolescentes, dijo. Pero las mayores tasas de fallecidas se dan en edades comprendidas entre 26 y 45 años.
También las ayudas económicas y la asistencia social son fundamentales para que las mujeres puedan salir del círculo de violencia, según Montalbán. Sobre todo en el actual contexto de crisis. “Hay más casos de violencia económica dentro del proceso largo de maltrato –que el marido no les de acceso al dinero-. Y muchas mujeres no denuncian porque no tienen empleo y temen que ellas y sus hijos se queden sin sustento”, explica la experta. En este sentido, Montalbán cree que hay que desvincular la ayuda económica y social de la denuncia. “Esa ayuda la necesitan antes de la denuncia. Y si luego no quieren denunciar, por lo menos que salven la vida”, dice.
La ministra Ana Mato anunció una estrategia nacional contra la violencia de género. Para ello el CGPJ ha mantenido contactos con Sanidad. Pero el contenido, dicen desde el organismo, no está definido. “Lo que sugerimos es terminar de implantar la ley integral vigente”, avanza Montalván.
El apoyo asistencial y familiar es clave para evitar los casos de violencia de género. Primero para que las mujeres que lo sufren den el paso de denunciar, pero también para que lo hagan en condiciones de seguridad. “Es conveniente que se pongan en contacto con el 016 para asegurar su protección”, afirma Montalbán. “A los primeros malos tratos tienen que acudir a las instituciones”, insiste. Las instituciones y el entorno tienen que trabajar para fortalecer a la víctima para que rompa con la situación de violencia. Según los datos del CGPJ el 72% de las fallecidas el año pasado mantenían una relación con su agresor (con o sin convivencia), ocho de ellas, mantenían ese vínculo aun habiendo denunciado a su pareja.
De las 62 fallecidas el año pasado, siete tenían orden de protección vigente, pero tres habían reanudado la convivencia. Lo que revela el dato de que en cuatro casos el presunto asesino quebrantó una orden, un 0.02% del total de órdenes de protección que habían dictado los órganos judiciales (23.514). Por eso, a la institución judicial le preocupan los casos en los que no se denuncia. Tampoco el entorno de la víctima. Solo en torno al 1% de las denuncias las presentan los familiares. “No se deben banalizar las amenazas previas. Todas son graves”, alerta Montalbán. “Hay que concienciar de que los malos tratos matan y no podemos mantener un manto de silencio”, añade.
Otra de las medidas fundamentales según la presidenta del Observatorio de violencia de género es la formación de las fuerzas policiales, abogados y fiscales. El 72% de las muertes el año pasado se produjeron en el domicilio. “En esto es muy importante el tratamiento judicial, porque no hay terceros testigos, ajenos a las partes. Cuando se presentan las denuncias pocas aportan testigos. Por eso es importante la especialización, para que se recojan las pruebas circunstanciales datos y elementos de prueba en los domicilios”. También para que las evaluaciones de riesgo que hace la policía, que en las denunciantes de 2011, en ningún caso se evaluaron como extremo, cumplan su objetivo. “Si una mujer dice que siente miedo, tienen que saltar las alarmas”, según Montalbán.